Se forma un círculo amplio en el patio trasero de una casa, totalmente cubierto de nieve artificial, y (los miembros de la familia que hacía dos minutos estaban sentados en la mesa del comedor,) comienzan a susurrar.
PADRE.- Madre mía, madre mía. (Se lleva las manos a la cara y mira a todos lados.)
ABUELA.- Pensaba que no podíamos superar lo del año pasado.
ABUELO.- ¡Me vais a enviar al otro barrio con tanto disgusto!
HIJO.- Tranquilicémonos. ¿Qué podemos hacer?
Se olvidan del secretismo y comienzan a elevar el tono.HIJA.- ¡Encima nos lo preguntas cuando toda la culpa ha sido tuya!
ABUELA.- Siempre supe que eras la oveja negra de la familia, pero no tanto.
HIJO.- ¡Soy muy influenciable! ¡No pude resistirme! ¡Esa muñeca horrible me estaba martirizando!
HIJA.- ¿Influenciable? ¡Serás mamarracho!
HIJO.- ¡Si me dijiste tú que la tirase por la ventana!
HIJA.- ¡A la muñeca, coño, no a mamá!
Comienza a sonar un villancico y los personajes miran al frente.
TODOS.- ¡Feliz Navidad a todos!
Sonríen y saludan a cámara.
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