27 junio 2012

Bifurcaciones.

Vamos a ser majos aparentando ser cínicos, y a ser cínicos aparentando ser majos. A terminar todas las frases con una sonrisa, aunque nos carcoma por dentro. A tirar la tostada a propósito por el lado de la mermelada y aplastarla con saña contra el suelo. A tirar flores a nuestro paso sin haberles arrancado previamente las espinas. A tomar siempre el mismo camino en las bifurcaciones, aunque nos carcoma por dentro. A presumir de ojeras y pieles blanquecinas en contra de los cánones. A reivindicar nuestras virtudes donde otros ven defectos y viceversa. A querernos hacer daño y hacernos daño queriéndonos. A enviarnos mensajes subliminales en palabras carentes de significado.

22 junio 2012

Sin título, y cuántos van ya.

Hoy más que nunca trago saliva y me muerdo la lengua. Porque hay momentos en los que es mejor no decir nada, y dejar que un par de ojos empañados expresen todo lo que no puede ser dicho. Dando rienda suelta a momentos que no por tópicos son menos ciertos.

21 junio 2012

Preámbulo.

Se quitó la sonrisa porque le hacía daño en las comisuras de sus labios. La guardó en el primer cajón de la mesita de noche, dentro de una caja que cerró con dos vueltas de una pequeña llave dorada, y decidió mantenerla en aquel oscuro lugar hasta que curasen las heridas y renaciese de sus cenizas.

Las hojas pasaron de marrones a verdes pero la mueca insípida y vacía seguía inmutable pese a los intentos. La llave se había estancado y, por más que la girase, la cajita no parecía estar por la labor de liberar su contenido. Y es que la llave sabía que después de tanto tiempo no valía la pena abrirla para encontrar a su habitante sin vida.

20 junio 2012

(2)

Confirmó su enamoramiento cuando le dijiste que estaba fumando demasiado. Y pese a haberlo pronunciado como un hecho y no como un reproche, él más como un impulso que como derivado de un complejo proceso pensativo, apagó el cigarrillo que sostenía entre sus dedos y se comprometió a rebajar drásticamente su consumo. Porque eras una de esas pocas personas por las que estaría dispuesto a sacrificar hasta el más arraigado de sus vicios para complacerte.

19 junio 2012

(1)

Se enamoró de ti porque de tus auriculares se adivinaban los sonidos de una canción de Frank Sinatra. Y quién en su sano juicio no se enamoraría de algo relacionado con la voz de Frank Sinatra.

Héroes.


Seríamos héroes sin capa.

17 junio 2012

Emoticono triste, enter.

No me gustan las despedidas. No me gustan las despedidas porque los sentimientos se ponen a flor de piel, y los sentimientos cuando se ponen a flor de piel pierden la esencia de su significado. No me gustan las despedidas porque volver a casa tras casi tres años ininterrumpidos en una ciudad donde he pasado los mejores momentos de mi vida es un retroceso sin parangón que sume a uno en la más profunda desesperación. La de que la vuelta a casa no signifique un cambio de hábitat, sino la pérdida de todo lo conseguido hasta el momento. El abrazo a un modo de vida vacacional, pero sin fecha de retorno en el billete del viaje. No me gustan las despedidas porque las ganas son descomunales y las oportunidades muy limitadas, y casi siempre hay alguien que se adelanta a la que pudiese ser la de tu vida. No me gustan las despedidas porque no sé cuándo será la próxima vez que vuelva a verte. A veros. Y a verte.

No me gustan las despedidas porque me pasaría la vida contando los segundos que tardaría en decirte 'hola' de nuevo.