31 diciembre 2009

Querido 2010.

Querido 2010,

No sé si estarás acostumbrado a recibir cartas. Debería escribírsela a los Reyes Magos, pero prefiero enviártela a ti que duras 365 días que no a ellos que durarán una Cabalgata, una noche y la mañana siguiente.

No tengo muchas cosas que pedir, aunque eso no significa que lo que te pida no sea de gran envergadura. A mí en la vida no me preocupan demasiadas cosas. No necesito la fortuna de Lily Van der Woodsen, vestir con ropa de diseño, tener un loft en Manhattan ni gastarme miles de euros al día en caprichos varios. Mis aspiraciones en la vida son terminar la carrera con un expediente decente, vivir en una ciudad que me guste y de lo que me gusta, tener un sueldo que me permita vivir con comodidad (léase comodidad como poder llegar a fin de mes sin demasiados sacrificios), estar rodeado de aquellas personas que me importan y ser, a grandes rasgos, feliz.

Sé que muchos de estos objetivos no te incumben a ti porque es demasiado pronto para pedírtelo, pero simplemente te pido que durante tu trayectoria me ayudes a que se vayan cumpliendo poco a poco. ¿Te parece que pido demasiado? Sinceramente, espero que no.

You know I'd really like you to love me.
xoxo.

30 diciembre 2009

Si yo tuviera un recogepolvo...(8).

Yo no sé cómo hago, pero:

1. Me paso la vida tirando mierda de mi habitación.
2. Cada dos por tres cambio las cosas de sitio.

Hoy mientras hablaba con él, mi hermano me pidió Internet un momento y, mientras, me dije: voy a cambiar los CDs de sitio y los voy a pasar de los estantes a la estantería (en el otro lado de la habitación). Pues nada, ahí que me fui yo a cambiarlos de sitio. Y claro, ya que estaba y me di cuenta de que encima de los demás cedés había muchos papeles, me puse a hacer limpieza.

¿Por qué tenía guardados billetes de autobús, tickets del Día y el CD del libro de francés de primero de ESO, entre otras reliquias? Es algo que nunca comprenderé.
¿Por qué seguiré haciendo esto hasta el resto de mis días? Algo que tampoco comprenderé por vueltas que le dé.

Al menos esta limpieza me sirvió para encontrar artilugios cuya existencia desconocía o no recordaba hasta este momento:

1. El boli de las bodas de oro de la hermanastra de mi madre. Me hace gracia porque viene guardado en un tubito y parece que dentro haya de todo menos un boli. Algún día os lo enseñaré.
2. Una muestra de colonia, que oye, nunca están de más.
3. Los dados de la ruleta de chupitos, que no sé por qué no están guardados en la caja de la ruleta.
4. El DVD del concierto de guitarra de mi antiguo profesor de inglés de bachillerato, ese ser nauseabundo. El DVD me lo dio Julia, porque se lo dio él sin comerlo ni beberlo, hace ya años, y ni lo he visto ni se lo he devuelto, y eso que me lo pidió. ¡Pues habrá que verlo para echarse unas risas!
5. Un cassette de Eternal de la banda sonora del Jorobado de Nôtre Dame que vete tú a saber dónde conseguí. Eso venía de regalo en unos cereales como mínimo.

Aproveché para meter cosicas en mi caja de recuerdos, y hacer el tonto por la webcam enseñando cosas de mi habitación como el pajarraco que venía en una tarta que me dieron en lugar de la tradicional rosca (no soy muy fans), el mítico libro de las Spice Girls supuestamente escrito por ellas, la colección de fotos de las mismas... ¡Si es que en mi habitación tengo un mix de cosas...! Que por cierto, me acabo de dar cuenta de que en un cajón tengo las galletas de forma fálica que me regalaron por mi cumpleaños. Prefiero no abrir esa caja porque desde ese 1 de abril, ha llovido mucho. Demasiado.

28 diciembre 2009

2009

Inspirado en Nat, voy a hacer un repaso mes por mes de lo que ha supuesto 2009 para mí, si es que me acuerdo de algo que poner en cada mes.

En ENERO vi por primera vez la nieve. Sempre Xonxa. FEBRERO fue mes de exámenes. Histeria colectiva. Las peores notas de mi vida y me sigo preguntando qué me pasó en algunas asignaturas para haber sacado tan poco. En MARZO fui por primera vez a la bolera y me presenté al casting de Operación Triunfo en Santiago. Después nos fuimos a una exposición de radio en la que colaboraron como la mitad del profesorado de mi facultad. En ABRIL me llegó la veintena y con ella la era de los patitos. Celebramos mi cumpleaños en el piso. Fuimos a ver a Russian Red a la Sala Capitol, y la rusa estaba drogada. Además fue la fiesta de mi facultad con temática de series y películas. Nosotros nos disfrazamos de un sucedáneo de ¡Fama!, aunque yo más que un bailarín hortera parecía un pandillero sin estilo. En MAYO vi en directo a Nena Daconte y me cagué en mucha (muchísima) gente. En JUNIO fueron los exámenes y saqué mis mejores notas en la carrera. El día 29 fue el último y los pocos que quedábamos allá que nos fuimos a celebrarlo. Acabamos sin pisar un solo local, borrachos como cubas en el piso de Sara T. bebiendo champán en su habitación y jugando a la botella mientras sus compañeros estudiaban a las 5 de la madrugada.

En JULIO fui a Vigo a hacerle una visita a Silviña y de paso hice unas compras (discos y ropa). En Santiago me compré 4 libros y busqué piso con Lorenzo. Además tuve reencuentros: con Sandra por un lado, y por otro con Noe, Cris y Belén en Santiago, ya que nos fuimos a pasar el apóstol a la capital. Conocí a Zaida y a Kuiky y pasamos un fin de semana para recordar. No vimos a Carmen pero nos encontramos a Mariña en el Apolo y nos despedimos de ella con un abrazo enorme (Erasmus). En AGOSTO empezaron los desayunos domingueros en el Isolino, que no tuvieron demasiada duración por mi parte, al menos. Además me fui un fin de semana a Portonovo con la misma tropa del Apóstol, excepto Belén. En SEPTIEMBRE fui a Barcelona por primera vez, con Carmen, Pichel y Alba Cidre. Fuimos a ver a Coldplay y conseguimos, sin comerlo ni beberlo, estar entre las 10 primeras filas. Me saqué el teórico de conducir. Joaquín vino a Santiago unos días antes de empezar las clases y me pude despedir de él (Erasmus). Probé los porros por primera vez. En OCTUBRE comenzó tercero y con ello nuestra depresión. Cumpleaños de Alba y el recuerdo de que me corté el pelo. NOVIEMBRE fue el peor mes de todos con mil y un trabajos, pero al menos Joaquín nos vino a dar una visita. Además vi a Zahara en acústico en A Coruña y mi enamoramiento fue definitivo. Gracias al concierto conocí a Javi.

En DICIEMBRE te conocí, y qué más puedo decir.

26 diciembre 2009

Chocolate etcétera.

El rinconcito del chocolate tiene la altura de un estante del armario de la comida. Entre chocolate con leche del de toda la vida, chocolate con Lacasitos, turrón de chocolate (de Suchard entre ellos, el cual acabo de empezar ahora), chocolate para fundir y chocolate suizo que nos trajeron mis primas. Ah, y además hay por ahí pululando una caja de Ferrero Rocher, los cuales suele comprar mi madre siempre por estas fechas. Por alguna extraña razón, nadie los come a tiempo cuando se abren, y acabo yo, un mes después, comiéndome 3 o 4 al día y más contento que unas castañuelas.

Debería ser un crimen que me gustase tanto el chocolate. Encima hoy mi madre me dio un enorme trozo de tiramisú, "es que hay que acabarla hoy". Que oye, aunque el de mi madre no lleve mucho chocolate precisamente, yo la incluyo en el lote, que soy muy dado a agrupar los guilty pleasures culinarios en un solo lote, ya sea por acabar antes o por tener más donde elegir al estar todos juntitos en amor y armonía (y ahora pienso en lo fea que me parece esa palabra sin h-).

23 diciembre 2009

Tú (I).

Julia me ha regalado un marcapáginas con imán del Museo del Prado, con la imagen del Caballero de la mano en el pecho de El Greco. Así quizás no me pierda cuando empiece a escribir en mis Moleskines azules de 10 euros, que compré contigo a mi ladito y me guardaron en una bolsa de papel (la cual ha sido ya bautizada como mi bolsa de almuerzo de niño norteamericano).

En la primera página pondré nuestros nombres, pero dejaré la recompensa en blanco, porque aunque la perdiera, me conformaría con saber que conservo los recuerdos de nuestros primeros días juntos en mi memoria. Que aunque sea selectiva, desquiciada y problemática, no puede dejar de pensar en ti.

21 diciembre 2009

:)

:)

16 diciembre 2009

:)

Qué alegría qué emoción,
que me siento tontorrón.

05 diciembre 2009

Sí es lo mismo.

Mi compañera de piso Nathalie está estudiando segundo de Medicina. Se pasa las tardes estudiando, y a veces cuando hablamos sale el tema del volumen de nuestros apuntes. Yo le digo que nosotros es normal que tengamos entre 30 o 60 páginas de apuntes. Ella siempre me dice que es muy, muy poco. Yo le digo que mi carrera se basa también en muchos trabajos y que con los apuntes que hay normalmente no empiezo a estudiar hasta que empieza el período de exámenes, y de hecho es lo que hago siempre, aunque a veces pueda mirar los apuntes para que me vayan sonando cosas antes. ¡Ja! Siempre las olvido. Y entonces en un punto de la conversación surge el argumento que me lleva a escribir hoy.

Nathalie siempre se queda anonadada ante mis palabras, ¿quizás envidiosa de que no tenga que estudiar todos los días?, y yo le digo que es normal que Medicina requiera una mayor puesta en día, primero por el volumen de conocimientos que se imparten, que no tiene punto de comparación, y en segundo lugar por la responsabilidad que implica ser médico. Que el periodismo también tiene cierta responsabilidad social porque somos quienes dan a conocer lo que pasa en el mundo, pero que se queda a años luz.

Pues ayer me di cuenta de que mi razonamiento era erróneo al ver la entrevista que le hizo Jaime Cantizano al hermano de Diego Pastrana, el chico acusado de haber matado a la niña de su pareja. Los errores de un periodista no complican enfermedades, no provocan reacciones alérgicas (aunque algunos tengamos alergia a la COPE e Intereconomía) y sobre todo no matan. Pero los errores de un periodista pueden destrozarle la vida a una persona al igual que a las víctimas de la falta de profesionalidad de un médico. Y a veces no nos damos cuenta, o peor, no nos queremos dar cuenta, pero nuestra profesión es relevante e importante como la que más. Quien diga que el periodismo no es necesario, como nos gritaron a Noelia y a mí al grabar en el casco antiguo de Santiago de Compostela pero en otras palabras, se engaña a sí mismo.

Y lo dejo así, inconcluso, para que me ayudéis a terminarlo si os apetece o tenéis tiempo para ello.

PD: Si se da la casualidad de que has accedido aquí por la persona mencionada en el artículo, que aquí uno no se fía de Google desde que al antiguo blog de Julia entraban buscando a Cristina Rapado, puedes irte ya.

23 octubre 2009

Siento haber estado tan ausente.

Siento haber estado tan ausente, pero mi vida me deja pocos momentos para la reflexión profunda y la inspiración literaria que fundamentan la existencia de este humildísimo blog.
No tengo excusa para no haber escrito nada en septiembre, ya que incluso tenía un buen tema que tratar: mi primera visita a Barcelona para disfrutar del directo de Coldplay y el aborchonoso calor que embriaga la Ciudad Condal. Pero sin embargo mi vagancia, así como mi consumo masivo de series, se impusieron a las ganas de que este blog salga a flote.

Pero por desgracia ahora no es la vagancia lo de que me impide actualizar este blog ya no con una constancia o periodicidad fija, sino que prácticamente me es imposible hacerlo. La excusa de la Universidad es un cliché, un tópico a lo que todos recurrimos para excusarnos de dejar de lado facetas de nuestras vidas. Pero os puedo asegurar que en mi caso particular es cierto.
Porque mientras en muchas otras carreras sus estudiantes se limitan a asistir a clase y a estudiar, con sus correspondientes y necesarios descansos de por medio, tengo la suerte, ya sea buena o mala según quién lo considere, de estar en una carrera que requiere una gran dedicación no a la parte del estudio, sino a la de trabajos y prácticas de, hagamos una aproximación estimada, el 75% de las asignaturas.

En las escasas semanas que llevamos de curso ya hemos grabado un programa de radio, expuesto 2 veces en las clases prácticas de esa asignatura, y nos han encargado un documental de unos 5 minutos, y un trabajo de investigación informativa o comunicativa con la de horas de lectura de bibliografía y piezas informativas que eso supone. Y todos ellos son trabajos de grupo, con lo que las horas se convierten en "menos productivas" porque una gran parte del tiempo hay que estar esperando a que todos lleguemos, a que pongamos nuestras partes en común, a repartirnos el trabajo, a ayudar a los demás en los problemas que les puedan estar causando sus competencias, y un largo etcétera de complicaciones que surgen en cualquier situación similar en grupo.

Por ello os ruego que no tengáis demasiado en cuenta que esté desaparecido de este mundo, pues no puedo hacer otra cosa.
Os comunico, del mismo modo, que la angustia, fatiga y estrés ya se están apoderando de mi persona, y que tengo unas ganas enormes de que se pasen estos cuatro meses, los más complicados de la carrera, y poder respirar un poco de aire fresco, ya que la facultad es prácticamente lo único que piso durante la semana.

Os saludo desde el aula de informática de mi facultad. He venido a imprimir el billete de Renfe que me devolverá a casa durante el fin de semana. Aprovechando este tiempo que me he otorgado para "despejarme" compartiendo mis pensamientos, me estoy descargando el episodio de ayer de Grey's Anatomy. Ya que me saca de quicio, que la facultad al menos me sirva para algo productivo. No te fastidia. Le quedan 26 minutos, por si os interesa.

12 septiembre 2009

Mi frustración decorativa.

Mis planes de cambiar levemente la decoración, o más bien la colocación de los muebles, de mi habitación se ha visto frustrada debido a una malvada estantería que se vería abandonada si mis intenciones se hubiesen llevado a cabo. Y es que si por algo se caracterizan los habitantes de mi casa es por, además de no respetar mi intimidad, intentar planificar todo por mí. Por ejemplo, mi madre me obligó a cursar religión hasta 3º de ESO (siendo yo ateo desde 3º de primaria, aprox.), a ir a catequesis hasta 4º y casi puso el grito en el cielo cuando le dije que iba a hacer el bachillerato de humanidades (sabiendo ya la carrera que quería estudiar, y que era la opción preferente). Pero fijaos hasta dónde llega el grado de control, que cuando mi hermano y yo dejamos de compartir habitación (hace 5 años), no elegí un solo mueble. Estuve un par de meses viviendo en un cuarto en el que casi no se podía pasar de un lado al otro debido a que los muebles que íbamos a tirar permanecían inexplicablemente en medio -literalmente- de la habitación. ¿Haciendo qué? Joderme la vida, claro.

Cuando llegó el enorme escritorio, no tenía ni idea de cómo iba a ser. No tenía ni idea de cómo era. Se equivocaron en las medidas, y tuvieron que cortarlo para que cupiera (mi habitación no es claustrofóbica, pero tampoco espaciosa). Mis padres se pusieron en la puerta de mi habitación a observar. Les dije que me dejasen mirar, y me cerraron el pase y me dijeron, a gritos, que me fuera.

Días antes yo ya había decidido dónde iba a ir el armario. Perdón, quise decir que expresé mis intenciones de cambiar de lado el armario para que únicamente me dijeran, sin probar, que iba a quedar mal, y que se quedaba como estaba. Tócate los cojones. Total, que lo único que provocó la sabia decisión de mis padres por no dejarme decorar a mi gusto mi habitación fue que la estantería con mesita de noche se quedase al lado del armario, y al lado de la cama. Todo junto. Que, con el enorme escritorio que también queda justo al lado de la cama, hace que hacer la cama sea casi una misión digna de película de acción (en realidad se hace perfectamente, pero con tanto obstáculo parece un videojuego).

¿Por qué saco a relucir ahora todo esto? Pues porque se me ha dado por dejar de lado mi época de síndrome de Diógenes revistil, y he estado tirando muchas cosas, muchas revistas, muchos papeles inservibles que mi mente enferma pensó que podría necesitar. Por ejemplo, ¿para qué necesito el borrador de mi examen de Publicidad de primero de carrera? ¿O para qué necesito una Vogue de 300 páginas que compré por salir Victoria Beckham en unas 10? Como si fuese una adolescente esquizofrénica, arranqué todo lo que me interesaba de esa y otras publicaciones, y mis cajones vieron reducida su ocupación bastante drásticamente. También tiré algunas cajas, bolígrafos sin tinta guardados en tales cajas, y demás artilugios cuya existencia mi mente había borrado.

Acto seguido se me dio por cambiar de sitio la ex-mesita de noche al hueco del escritorio que hace esquina, donde colocaba la papelera. Ahora donde estaba la mesita, a espera de que mi padre se digne a hacerme más estantes en la mini-estantería, coloco el calzado en el suelo (creo que ya lo mencioné en otra entrada, en mi casa no acostumbran a guardar el calzado en las habitaciones y, cuando yo lo hago, se dedican a quitármelo sin permiso. La elección de armarios tampoco facilita las cosas), a la espera, sucesivamente, de que terminen de una vez el puff, que no tiene suelo y la tapa no está fija, y lo tengo muerto de risa ocupando espacio sin ser usado, para que una vez terminado pueda guardar mi calzado dentro*.


· A la izquierda, una minúscula parte del escritorio (encima de él hay 2 estantes). A su lado, la cama. A la derecha, la estantería, a cuya derecha está el armario. Donde yo quise ponerlo sería la pared desde la cual está hecha la fotografía ·



Pero claro, no podemos hablar de re-decoración, o re-colocación, pasando por alto mi aborto de contribución frustrada: el armario. Me decidí a probar a ponerlo donde yo siempre quise, en la pared del interruptor de la luz y mirando en frente de la cama, para así pasar la antena de la televisión por detrás del armario y no tener que hacer maniobras cirquenses si estoy viendo la televisión y quiero abrir el armario (o mi madre, debido a las grandes ventajas de que tu armario sea donde se guarda la ropa para planchar y, en tales días, te entren diez veces en quince minutos, siempre sin llamar, por supuesto). Cual fue mi owned cuando recordé que la estantería está atornillada al armario.

Total, que ayer le dije mis intenciones a mi madre, cuando ya había cambiado de sitio la mesita y recolocado el calzado. ¿Cuál fue su reacción? La que debió haber tenido hace 5 años cuando con toda mi buena y lógica intención quise hacer las cosas a mi manera y se me impidió. ¿Y qué se puede hacer ahora? Nada, porque aunque desatornillase la estantería y cambiase de sitio el armario, no tendría donde ponerla, ya que en el único sitio donde podría es imposible porque toca con los 2 estantes individuales de la pared. Vaya, que estoy condenado a vivir en mi no-habitación hasta que encuentre un trabajo con el que me pueda permitir un alquiler. O sea, hasta los 40.

*Tranquilos, es normal que no hayáis entendido nada en este párrafo. Más bien, es normal que no hayáis entendido nada en absoluto en esta entrada.

14 agosto 2009

She's dancing with the stars.



Muy buen fin de semana a todos, yo me voy a pasarlo a Portonovo.

02 agosto 2009

Desayunando, muyayo.

Esta mañana, Julia y yo decidimos irnos a desayunar juntos al Isolino. Como os podréis imaginar, el desayuno duró hasta la hora de comer, con cervecitas de por medio.
 


La verdad es que no es que hiciéramos mucha cosa de provecho, además de navegar en nuestros amados portátiles, cebarnos de buena mañana y mediodía, y sacar infinidades de fotos con y sin gafas (posteo las con gafas para hacer honor al nombre de este, mi precioso, humilde y artístico blog). Hubo tantas fotos, que incluso se podría hacer gif animados con ellas y quedarían como un vídeo. En concreto, yo acercándome el cigarrillo a la boca, haciendo el payaso con él, quitándomelo, y dedicando una lascividad bucal a la cámara para disfrute de mis espectadores, claro, claro. Este es uno de los frames que componen tan grande secuencia:



También tuve ocasión de presenciar un espectacular derrame de mosto sobre pierna, chaqueta, fular, bolso y asiento como nunca lo había presenciado antes, una pena que no quedase registrado por los aparejos mecánicos que nos acompañaban, aunque nos ofrecimos, sabiendo de antemano que quedaría publicado en algún blog, a deleitaros con una burda recreación irreal que nada tiene que ver con lo que en realidad pasó, pero que ilustra a la perfección el espíritu de mi acompañante al realizar tan memorable acto.


Su cara de loca la delató.

Y de repente la cabeza me da vueltas, así que me retiraré en breves instantes :\

15 julio 2009

A San José los ratones le han comido los calzones.

(Hoy escribo desde la profunda ira que siente mi ser, así que no me lo tengan en cuenta)

1. Hoy me desperté creyendo que la luz se había ido, porque el despertador no marcaba ninguna hora. Como al despertarnos no regimos por las leyes de la lógica, le di al interruptor de la luz, pese a creer que se había ido. Pero esta se encendió. Entonces recordé que me había despertado en medio de la noche con la figura de mi padre rondando por la habitación. Y es que mi padre, al llegar del trabajo, se dedica a entrar en las habitaciones ajenas apagando regletas -como si fuese el hombre del saco o el cuco- estén en uso o no. Hasta ahora sólo apagaba la que queda justo a la entrada, donde normalmente sólo está enchufada la televisión y el portátil, por lo que no importa porque no los dejo encendidos de noche (sin wi-fi, ¿para qué?), pero la del escritorio tiene entre otros aparatos el despertador, y lógicamente esa sí me importa, porque me gusta despertarme sabiendo qué hora es, y por su posibilidad de alarma. Y aún así, al decírselo a mi padre, se atrevió a decirme que como si no hubiese otras formas de poner una alarma. Para lo que no hay otras formas, por lo que veo, es para que finjas ser un ente inteligente. Lo peor de todo es que, si lo hubiese usado hoy de despertador por tener que ir a algún sitio, la culpa no sería de mi padre por apagármelo, sino mía por no haber usado otro aparejo como alarma. A quién se le ocurre, poner una alarma en el despertador...

Aunque con los antecedentes que hay en esta casa, no me asombra. Mi despertador siempre es el que sale peor parado. Todos lo desconectan, y nadie lo vuelve a poner en hora. Poner en hora el despertador es algo que DETESTO porque sus botones son odiosos y tienes que poner los dedos en una postura exacta para que funcionen, y a veces puede ser muy incómoda. Retraso la situación hasta el máximo, para ver si el culpable se da por aludido. Iluso de mí.

2. Por la tarde escribí en el otro blog sobre Daniel Radcliffe e hice un amago de chiste sobre el cáliz de fuego, que es el título del cuarto libro de la saga, y me dirigí al estante donde guardo todos los libros por si había tenía un lapsus linguae, aunque sabía perfectamente que lo había escrito bien. Delante de ellos tengo algunos productos contra el acné, y a uno de ellos se le había estropeado la tapa (la giré demasiado y saltó. Nunca me pasa nada cuando hacen esto, pero esta vez por causas desconocidas la tapa lo petó demasiado y no cierra) así que estaba sin tapar y acostado, con la tapa delante. Cuál es mi sorpresa cuando lo veo tapado y erguido. Os podéis imaginar lo que pasó: el líquido desparramado, y mis libros manchados, algunos de ellos inexplicablemente por en medio de los bordes y no sólo por abajo. La piedra filosofal ahora tiene una mancha horrible en la esquina inferior izquierda, de la portada aún por encima. Obviamente todos estos hechos fueron negados, y lo que es peor, mi madre dijo que pudo haber sido mi primita, que a veces se pone a jugar con los botes pero nunca los destapa y mucho menos les pone las tapas de vuelta, sólo los pone en el suelo para luego devolverlos a su lugar. Desordenados, claro.

3. Después de cinco minutos quitando pringue tanto de la mesita de noche que no uso como mesita de noche y de los libros, seguí escuchando música y al rato me levanté, porque cuando me emociono cantando me levanto y sigo cantando de pie. No sé cómo puse la vista en las "bolas de nieve" (tienen cositas brillantes en lugar de falsos copos), una de ellas del Empire State Building y la otra de Disneyland Paris, regalo de Julia. El estante (el superior) estaba lleno de polvo, y cogí las bolas para limpiarles los bordes en los que se acumulaba esta fastidiosa y horrenda materia. La bola de Disneyland estaba escachada por la parte de plástico, como si alguien la hubiese cogido y le hubiese dado un golpe tremendo. Otra vez, hechos negados, "puede ser por el paso del tiempo". Claro, que es de los años 50 y tiene un valor incalculable.

4. En mi casa, por razones que todavía me sigo preguntando, no guardan el calzado en las habitaciones, sino en las escaleras que van al ático. Yo, desde hace un par de años, guardo parte de mi calzado en la habitación, en concreto las zapatillas de andar por casa, y los dos pares que haya usado más recientemente, debajo del escritorio. Pero siempre acabo helándome los pies por tener que ir en busca de las zapatillas a las escaleras. Repito una y otra vez que si dejo ahí el calzado no quiero que nadie se lo lleve. Entra por un oído y sale por el otro.

5. Si hay algo que odio en este mundo es tener la ventana de mi habitación abierta. Me da igual en las demás habitaciones, en los pisos de estudiante, en casas ajenas, lo que sea, pero no en mi habitación. En parte es porque tengo el escritorio justo debajo de la ventana, haciendo esquina con dos paredes, y se llena absolutamente de polvo. Si ya de por si mi habitación coge polvo a raudales, con la ventana abierta el proceso se acelera. De vez en cuando, encima viene acompañado de moscas. Normalmente me la abren cuando me hacen la cama (sí, en casa me siguen haciendo la cama, tener dos amas de casa es muy traumático, sobre todo si tienes que aguantarlas discutiendo por quién hace qué) y yo la cierro poco después, teniendo que soportar las voces de "déjala abierta más tiempo". A veces, salgo un minuto al baño y la ventana está abierta. Salgo a dar una vuelta y al volver la ventana está abierta. Voy por la mañana a Santiago y al volver la ventana está abierta y el despertador acosado, negro por naturaleza, está medio blanco.

6. La mitad de las perchas de mi armario tienen ropa de mi madre. Además, es donde se guarda la ropa para planchar. A veces hay tanta ropa para planchar que literalmente no puedo sacar mi propia ropa sin ocasionar un alud textil. Llevo tres años intentando que mi madre la guarde en otro sitio. Al parecer no hay otro lugar en toda la casa. No importa que mi abuela sólo use dos pantalones y tres chaquetas y tenga un armario tan grande como el mío, ni que en su habitación haya dos puffs y una cama sin usar sobre los cuales se puede posar perfectamente, ¡qué va! Jodamos al niño, que si no tuviese suficiente con las intromisiones frecuentes en su cuarto también tiene que soportar que entren constantemente en él (siempre sin llamar, ¡y ni se le ocurra a usted pedir a su abuela que llame antes de entrar ni en su habitación ni al baño, que es una falta de respeto, oiga!) porque necesitan coger cosas que no estarían allí si se tratase de una casa normal con inquilinos normales.

Conclusión: debería dejar de llamarla "mi habitación" para pasar a definirla como lo que es en realidad: un cuarto comunitario donde cualquiera puede hacer lo que le dé la gana, porque total, como nadie habita en él...

¿A alguien le extraña ahora que esté tan loco? Lo extraño es que no le dé a la bebida, joder.

14 julio 2009

El transporte público es para frikis.

En el transporte público te puedes encontrar con gente muy extraña. Estamos las personas como yo, que somos más raros que un pelo en la planta del pie pero que nos comportamos civilizadamente, y están aquellos a los que le gusta dar el cante, o que se sienten mejor cuando se hacen notar, o cuyas neuronas simplemente han sufrido demasiado daño (quizás de fábrica).

¿Cuántos de vosotros habéis tenido que soportar que otro pasajero ponga su música, porque le sale de las narices, a todo volumen, molestando a todo ser viviente que comparte su vagón barra autobús barra whatever? Hace unos meses un gitano disfrutaba con Chambao en la estación de Vilagarcía. Lo más gracioso era, aparte de su estrafalaria vestimenta, que se quedó de pie en la entrada, que como sabréis los asiduos de Renfe tiene puertas con sensor, y mirando al vacío aka la pantalla del móvil los cuatro minutos que debió durar la canción. La semana pasada en el autobús, un joven mozo se dedicó a torturar mis pobres oídos, desprotegido uno de ellos por llevar dos meses con un auricular estropeado (soy tan vago que no voy a comprar unos nuevos), con la horrenda voz del ser que se hace llamar Melendi. Hoy en el regional alguien estuvo media hora pasando de canción a canción, cada cual más pastillera que la anterior. Lo malo es que entre ellas tenía Poker Face, lo cual me hace maldecir día sí, día también a la industria cultural por hacer a Lady GaGa carne de éxito seguro hasta en poligoneros. Con lo feliz que estaba yo el verano pasado cuando nadie la conocía todavía (me gusta hacerme el importante, como los sujetos del post de hoy, ¿vale? Pues eso).

Pero el día presente tuvo más "anécdotas" (por llamarlas de alguna manera) en medios de transportes. Y es que gracias a un amable conductor de Monbus, temí por mi vida. Bueno, no por mi vida, pero sí por mi paradero. El bus rezaba "Pontevedra-Toxa-G.", lo cual me hizo deducir que, lógicamente, el bus tenía el mismo destino final que yo. Entré con mi billete comprado en la ventanilla, el conductor me lo rasgó sin problemas, y al rato me pareció escuchar que ese autobús no iba a O G., pero que sí iba á Lanzada. Atónito, debido a la ilógica que reinaba en esa frase (A Lanzada, para los que no lo sepáis, es la playa más famosa de mi pueblo, que se sitúa en la entrada del municipio y es, además, la primera parada que hace dicho medio de transporte en tierras grovenses), quise levantarme para preguntárselo, pero me quedé en tal estado de shock que no me di levantado, así que el autobús partió y yo seguí con la incertidumbre. Al rato se subió una mujer con una niña (creo que eran gitanas), que le pidió claramente dos billetes para O G.. Vi que llevaba demasiado tiempo siendo atendida, pero no escuchaba nada. Se sentaron justo detrás de mí y le escucho decir a la mujer "me dio para El G. -sí, El- ¬¬U- pero yo no voy para El G., que voy a la rotonda que hay a la entrada" (la de San Vicente, por si os interesan los detalles). Vamos, que sí, que el autobús iba a O G. y no me tenía de qué preocupar. La mujer le fue a reclamar, a lo cual le contestó el conductor que le había dado el billete para donde lo había pedido, pese a que esta se lo negara (yo la escuché perfectamente decir O G., por si me quiere coger de testigo), y que no le podía cambiar ahora el billete. La mujer volvió a su sitio y lo llamó loco de remate. Él estaría loco, vete tú a saber, pero al menos no tenía alzheimer.

Poco antes de que llegase la mujer con memory issues vi temer la vida de la carpeta que llevé a Santiago (la cual contenía el recibo del contrato, el billete del bus, Desayuno En Tiffany's y un ejemplar de una revista pija que se me dio por comprar) cuando una mujer digamos que muy fuerte, y no porque estuviera gorda sino porque era, cómo decirlo, grande y anchota, casi se sienta encima de ella por no haber mirado antes al asiento. Y eso que había pasado por delante de él, porque retrocedió para sentarse. Pero mis manos fueron hábiles y astutas y lograron hacer el movimiento definitivo para salvarla: llevármela al regazo. Poco después la mujer presionó el botón de Stop y se levantó, pero algo debió fallar en el feedback entre el conductor y las señales que marcan las paradas, porque mi descuidada ex-compañera de asiento, muy rubia, algo morena y con voz de camionero, dijo: "¿A dónde va? Joooodeeeeer", esta última palabra (expresiva donde las haya) con las vocales muy arrastradas, para que se notase su descontento y su mala leche por hacerla caminar 50 metros más (que por cierto, le venían bien, sólo lo digo). Al salir me pareció verla arrojando un papel en llamas, pero eso fue porque estaba medio-dormido. Y yo cuando estoy medio-dormido, escuchando música sólo por la oreja derecha y sin haber comido a las tres y media, veo cosas muy raras.

12 julio 2009

Esta semana edición express.


(Vigo, 10/07/2009)

De compras, cañas por la tarde, cañas por la noche y expediciones express al supermercado. De estaciones de buses y trenes. De estaciones otra vez. De pasar de un magnífico Sol a su carencia en 24 horas. De dormirse a las 3 de la mañana después de escuchar música, reírse de Sheldon y leer 40 páginas narrando los preparativos de la boda de Bill y Fleur. De domingos astrománticos otra vez. De soñar con lo que no está y quizás nunca esté. De flotar, brillar, irradiar y alumbrar con sugus de colores, tan pastel. De luchar contra inevitables pensamientos negativos. De querer acabar y empezar a la vez. De paciente inconformismo.

05 julio 2009

Música de domingo.

El domingo está relegado por fuerza de hábito a ser un día aburrido, anodino, y con escasa utilidad. Para mí, el domingo es un precioso día para conocerse a uno mismo, ya sea en una estación de tren al llegar a la ciudad amada, viendo coches pasar por la ventana o sentándose en la habitación para escuchar un puñado de buenos discos. Porque hay música que parece estar hecha especialmente para ser escuchada un domingo.

Todos aquellos álbumes suaves cuyas melodías te lleven hacia aquel lugar, te recuerden a aquella persona, te hagan pensar en ese olor, te sugieran un color, en definitiva, que estimulen tus sentidos como si fuesen una droga (¿y quién dice que la música no sea una droga, a fin y al cabo?): Michelle Branch escribiendo en papel de hotel (sea lo que sea este), Sara Bareilles con su gran pequeña voz, Sheryl Crow cantándole a una flor salvaje o Russian Red probándose unas gafas... Aquellos clásicos que te hacen pensar en que quizás el pasado fue mejor: Frank Sinatra acordándose de aquella mujer de Ipanema o cantándole a esos desconocidos en la noche, Ella Fitzgerald y su oda a la cocaína o llorando ríos, Diana Ross preguntándose a dónde ha ido nuestro amor o escuchando sinfonías... Incluso aquellos discos que están en tu colección personal desde tu infancia y que sientes que están infravalorados: las Spice Girls afirmando que el paraíso de los necios es difícil de encontrar, o Britney Spears recitando que a veces hace esto y a veces lo otro...

Porque los domingos son para recordar, hacer un repaso por lo que uno ha sido y es, reafirmarse en lo que cree y, al ir a la cama, soñar que esta semana será mejor que la anterior.

(Hace un mes que no abro mi cola del Reader, espero no tener una sobredosis de posts nuevos. En fin, tengo lectura para rato.)

19 junio 2009

Mira tú

¡Anda, pero si tengo un blog!
Qué cosas, oye...

24 mayo 2009

Podría romper tu corazón cualquier día de la semana.

Podría llenar este cuadro de texto, pero prefiero que Amanda Leigh me llene a mí los oídos. Recomendadísimo nuevo álbum de Mandy Moore. Una joyita de las que pocos disfrutaremos.


Hey, c'mon, let's play a song, or two or three or four, or five if you want more...

15 mayo 2009

Bendición a la desconocida.

Gracias a un alma caritativa (que por su letra se diría que de sexo femenino, aunque dicen que los ángeles no tienen sexo (A)) que se dedicó a subrayar el primer tomo de Historia del pensamiento económico, hoy me he leído 70 páginas en el mismo número de minutos. ¡Ya sólo quedan 440!

Con calma.

Como diría Pucho.

Las palabras que no existen nos pueden salvar,
y a veces las que existen nos pueden tocar mucho la moral.

29 abril 2009

Quinto derecha.

Después de leer 3 libros sobre la relación entre Iglesia y política (uno de ellos diciendo lo buena que ha sido para la configuración de la sociedad occidental, otros dos narrando los horrores de los gobiernos ajenos con ellos, pero no las atrocidades cometidas por la Iglesia) y uno sobre la envidia en la sociedad (que constituye un preludio de crítica del socialismo), ahora me toca un libro de apenas 200 páginas (aunque tuve que coger una edición 2 en 1, de casi 500 páginas) en el que me intentarán convencer de lo errado que está el socialismo. ¡Y todavía que queda una soporífera historia sobre el pensamiento económico en 2 volúmenes!

Conclusión: Niños, no dejéis ninguna asignatura pendiente de un curso anterior, se puede convertir en vuestra peor pesadilla aunque sea la que tiene menos créditos. :)

27 abril 2009

Alegrías de la vida capítulo I.

A veces la vida te da alegrías. Nuevas amistades, proyectos y trabajos remunerados o al menos simplemente reconocidos...



Mi alegría de hoy es la retirada de Gossip Girl de la parrilla de Cuatro. Porque sí, yo soy de esos que queremos seguir siendo guays por ver Gossip Girl desde hace un año y medio en versión original con subtítulos en castellano y que podemos decir la frase "You know you love me" ya que nuestros oídos no han sido mancillados por la horrenda traducción al castellano.

Ay, audiencias, a veces tan perras y a veces tan adorables.

Santiago se llenó de un halo rojo ruso.



El sábado, cierto mancebo energúmeno y con cierta deficiencia mental se dispuso a salir de su casa bajo la lluvia en dirección al centro de la ciudad, donde tendría lugar un maravilloso concierto de cierta enana rusa (o eso creemos), Russian Red para los amigos y demás fauna. Por eso se duchó, se puso la camiseta que se había comprado el día anterior justo después de cruzarse con el azafato al que le dedicó un post en ocasiones anteriores, cogió el paraguas, su entrada, y listo. Bueno, antes también se puso pantalones, zapatillas y esas cosas para no parecer un imbécil exhibicionista. 



Al escenario salió Chapo, el técnico de nuestra facultad. En realidad no era Chapo, pero nosotros lo creemos en el fondo de nuestros corazones.

Las luces se apagaron. La rusa salió al escenario y se puso a cantar. "Da da da da, da da da da". Su cara la delató.
-Está drogada -dije, acto tras el cual mis maravillosas acompañantes (CaR, Zoey y Helen) se rieron. Pero con el tiempo me dieron la razón. JA!



Muchas canciones conocidas, alguna que otra nueva (todas geniales), momentazos como el xilófono, el gesto de pistolas con el guitarrista... Y sobre todo decirnos que, de los 3 conciertos seguidos que dio ese fin de semana, el nuestro había sido el mejor. Probablemoente lo dijo en los otros lugares, pero lo agradecimos.



Manolo el del Bombo también hizo un parón en su gira para apoyar a la Selección y se dejó ver en la Sala Capitol. Allí seguro que estaba todo el mundo, personalidades de las importantes como políticos, espías del PP y mismo contagiados de la gripe porcina. 



Y tras un intento frustrado de captar la imagen de grupo, se fueron. Volvieron a salir. Se fueron. Volvieron a salir. He aquí unos fans de la mítica canción de Chenoa. No diré el título, es demasiado obvio. Y si no lo pillas, allá tú, marginado social.

Después volvió a salir el técnico, y CaR y yo gritamos a la vez:
-¡Chaaaaaapoooooooo!
Fue un momento muy gracioso porque, aparte de haberlo gritado a la vez, la gente se nos quedó mirando. Siempre dando el cante, desde luego...

(PD: En próximas entregas os contaré la bonita historia de la histeria que nos provocó nuestro maravilloso acompañante de delante. Nunca lo olvidaremos.
PD2: Aunque no lo parezca, esto no es un blog de Russian Red. O eso quiero creer.)

18 abril 2009

Conceptos fotográficos.



Con flash.



Sin flash.



Plano detalle.

17 abril 2009

Carta abierta a los dementes.

Ahora se trata de algo personal, porque me habéis hecho llorar.

He aguantado tener que ver cómo unas de las personas a las que más quiero han sufrido por vuestra culpa.
He sufrido con ellas.
He sufrido por ellas.
He aguantado vuestro comportamiento y he alucinado al enterarme de vuestras muchas caras.
He reprimido muchas veces las lágrimas.
He callado para no hacer daño.
He callado por respeto a la vida humana.

Pero ahora todo se acabó.
Ahora se trata de algo personal, porque me habéis hecho llorar.

Y no pienso decir más.

14 abril 2009

Rojo ruso.


Nada, este cartel de Russian Red queda muchísimo mejor en mi cuarto de Santiago que en la Facultad (no comentéis el caos de mi escritorio, please ^^).


¡Mira que es guapa la jodía!
Y el sábado 25... ¿en qué ciudad pone que está? Mmm... ay, no sé, no sé... quizás... ¿Santiago de Compostela? 15 eurillos, venid con papi para ser convertidos en entrada por arte de magia y de consumismo (más bien de consumismo) :D

11 abril 2009

Nunca digas nunca.

Hasta hace un par de meses era incapaz de escribir una canción decente en castellano. Dicen que uno escribe de lo que vive y de lo que bebe, y la música en castellano no es que haya tenido nunca una presencia destacada en mi lista de reproducción del Winamp.

Sin embargo, algo cambió los últimos días de febrero. No fue ningún hecho en especial, tampoco algo que ocurriese en mi vida. Simplemente me senté y dije: voy a escribir una canción en castellano. Y lo hice, y fue lo más bonito que compuse en meses. O quizá años, no lo sé. Superado ese obstáculo, otro se interponía en el camino. Y es que es muy fácil hacer algo por primera vez, pero la dificultad llega cuando tienes que repetir el proceso para proporcionar algo diferente bajo la misma acción. Así que unos días después volví a sentarme cuando la musa me llamó y me dijo que era un día bonito para salvar vidas, en lugar del it's a beautiful day to save lives que sale de las cuerdas vocales de Patrick Dempsey mientras interpreta a Derek Sheperd. Aunque la música más que salvar vidas lo que hace es endulzarlas, pero no me apetece ahora visitar wordreference.

Desde ese día, ya han sido algunas cuantas las veces que he logrado componer en castellano. Nunca he sido un gran admirador del idioma de Cervantes, me considero más Shakespeariano o Rosaliano en ese aspecto, pero si forma parte de mi vida, y parte de mi vida es la composición, también tenía derecho a su porción de pastel.

No pretendo con esta entrada presumir de aquello que hago, pues cada uno tiene sus hábitos y sus artes: algunos seguro que rompéis cristales con vuestras voces, otros llegaréis a ser best-sellers con una historia que nos pondrá el vello de punta, y así sucesivamente.
Lo que pretendo es únicamente decir una frase muy tópica pero que, casualidades de la vida, a veces es además muy cierta.

Me remito al título de esta entrada.

07 abril 2009

¡PLACA! ¡ZASCA! ¡RRRRA!

Tengo

placas

en las

anginas.

Qué divertido.

20 marzo 2009

Gafas negras.

Quiero unas Victoria negras. Mi madre me dijo que me las comprase en Santiago y que serían mi regalo de cumpleaños.
Eeeeeeeeeeeeeeeeehm.

Le digo que por mi cumpleaños quiero unas gafas de Sol, que hace dos años que llevo queriendo unas y al final lo fui pasando, lo fui pasando. En concreto, quiero unas Wayfarer negras (¿negras, yo? Imposible). Fuimos a una óptica y me las probé. Ay omá. 130 euros, pero no soy de caprichitos y espero que este se me conceda.

-¿No tienes tú algo de tu dinero?
-Sí, ¿y cómo me pago el viaje a Barcelona?
-Pues no vamos a ganar para gafas, porque tu padre también necesita unas de Sol y otras para ver, que tuvo revisión del oculista y ya le mandaron ponerse unas, y tiene que volver en abril.

A mi madre se las pusieron el año pasado, y ahora a mi padre. O sea que quizás con el tiempo yo también tenga que llevarlas. ¡Y pensar que toda mi vida lo quise (sí, me dan morbo los tíos con gafas xD)!

19 marzo 2009

Pseudo periodismo

Hola, soy un periodista de La Razón, aunque también podría extenderme indistintamente a otros medios como El Mundo, ABC o la COPE. Pertenezco a un sector en peligro de extinción de la sociedad humana (al igual que los niños, que se los comen los linces y los mata Zapatero) y me caracterizo por mi enorme capacidad de deducción y de poner en relación los distintos elementos de una noticia, incluídos todos aquellos que en principio parecen ajenos a ella.

Por ejemplo, yo fui el primero en demostrar que Garzón es un mal juez. ¿Cómo? ¿Demostrando que sus sentencias son injustas? ¡Ja! Principiantes. ¡Mostrando sus fotos en un viaje en Latinoamérica! Ese continente que en poco dejará de existir porque todos vienen a España para quitarnos el dinero, el trabajo, nuestras casas, nuestros hijos y nuestras mujeres.

También fui el que se dio cuenta de que la Iglesia Católica es la institución más solidaria del mundo. Cuando el Papa dijo que el condón no es una solución contra el SIDA sino un medio de su propagación, una luz se encendió en mi interior.

Esa luz era un mechero, y la usé para quemar una Iglesia tras rociarla de gasolina. ¡Mierda, me acabo de convertir en un maldito progre piojoso con ideales absurdos, exterminadores de fetos, salvadores de toros y aberrantes defensores de Palestina!

12 marzo 2009

Los resignados.

El resignado dijo "vale", y "vale" se convirtió en la palabra de moda. El resignado siguió su camino de ansias de notoriedad y brilló con luz propia. El resignado se creció demasiado, alimentando su ego hasta límites catastróficos que deformaban la autenticidad de sus méritos.

La masa se quitó la venda, y quitarse la venda fue todo un fenómeno social. La masa comprendió que la cobardía se disfrazaba de extroversión, el vacío de muletillas, los complejos de altivez, y la estupidez... no, la estupidez seguía explícita. A veces las masas se equivocan y se comportan como estúpidos por acción del resignado. Pero otras veces al resignado se le intuye la resignación antes de causar estragos.

Los resignados están por todas partes. Están en aquel que se deja en evidencia durante una clase a la vez que intenta ser popular, están en aquel que trepa para convertirse en líder de masas, están en el dictador que extermina sin ton ni son, están en los alardes de superioridad de la burocracia y de la banca, están en aquel que desprecia y merece ser despreciado. Están en la naturaleza humana, bien escondidita o cruelmente expandida, y su único remedio posible se llama
matar.

07 marzo 2009

Citas célebres (2)

Y no, sorprendentemente no voy a decir la de Zapatero.
Homer Simpson no podría ser gay. No sería capaz de salir en tantos capítulos siempre con la misma ropa.
(Guionista de El Intermedio, en boca de Juanra Bonet)


No podría estar más de acuerdo con que Homer nunca sería gay. De hecho, Homer tampoco es hetero. Es rosquillosexual.

01 marzo 2009

Papeletas de colores.

El miércoles fuimos de paseo por el centro. Y cuando digo paseo me refiero a que me gasté 65 € en el Pull & Bear y me siento muy culpable (maldito consumismo). Rosa Díez estaba en la capital gallega, y no eran escasos los repartidores de papeletas, carteles y demás de UPD a la puerta del hotel en el que haría su acto. Todos los que nos dieron acabaron en los múltiples contenedores y papeleras que habitan en el centro. Algunos ya ni los cogimos, poniendo cara de asco y diciendo cosas como: "quita de aí". El jueves vimos lo que UPD considera que es bonito durante la campaña: poner sus pegatinas encima de carteles de otros partidos. De camino a Renfe para dar la bienvenida a Iago, Carol quitó todas las que estaban en los carteles del BNG. El parque de nuestros edificios estaba lleno de pegatinas estratégicamente colocadas en papeleras. UPD nos invade.

El jueves cogimos camisetas de Eu son Anxo Quintana en la facultad. Talla L larga. A ver quién se mete ahí sin parecer ya no sé ni lo qué, un jugador de baloncesto después de adelgazar 20 kilos. Lo mejor era que de los 6 que estábamos, sólo 1 o como mucho 2 éramos del BNG (yo excluído). Nunca me pondré esa camiseta, pero mira, me hace ilusión tenerla. Ya tengo algo que ponerme para dormir, limpiar el piso, hacer deporte en zonas inhabitadas...
Carol intentó hacernos del BNG. No dio resultado. Es una política frustrada, o eso creo. Pero hablando con una derechista, un renegado de ese partido y un votante del PSOE entre otros, la cosa estaba difícil.

El viernes mi padre nos recogió a mi hermano y a mí en la estación de Vilagarcía, como todos los viernes que volvemos a casa para descansar de la estresante vida universitaria. Los tertulianos de la Cope (emisora de la que soy muy fan y con fan me refiero a que les quemaría las antenas para que no los escuchasen ni en el propio edificio) demuestran su gran capacidad intelectual: "Hasta qué punto manipulan los de TVE que en un rótulo ponía que Rajoy se presentaba a lehendakari, todo para confundir al electorado vasco". Curri Valenzuela puede poner a Zapatero en llamas durante los incendios de Australia. Error humano. Un operario puede confundirse al poner el nombre del candidato del PP en las elecciones. Manipulación, sectarismo.
Pregunto en alto: "¿Los tertulianos de la Cope tendrán aprobada la primaria? Porque hablar de manipulación -y que lo digan ellos que son taaan imparciales- por un mísero error humano...". Mi padre contesta: "Es que siempre pasa con los mismos".
Conclusión: Lo peor no es que los tertulianos de la Cope se lo crean. Lo peor es que hay gente que se lo cree al escucharlos.

La cuestión: ¿Voto sincero sin utilidad o voto algo menos sincero pero útil?
El resultado: Vote al partido que vote, votaré al mismo color.

15 febrero 2009

Recopilatorio.

Como algunos sabréis, escribir canciones es una de mis pasiones.
Como todos sabéis, me gusta exhibir mis creaciones.
Como os imagináis por el título, os voy a dejar algunas de las frases que más me gustan de mis canciones.
Como quizás sepáis: están en inglés. JA.

I'm a miserable slave waiting for release
Sick and tired of his disease
Looking for someone to please
(Music Makes Me Lose Control)

You have given me your sincere support on the bad times
And I feel I've had a lack of nice words
You have been there everytime I suffered from sadness
And my eyes could only see the blur
(Underrated)

All that I've heard you talking 'bout is guns and swords
Don't have to be a genius to understand those words
You must've had a trauma, you're clearly not over it
Your words and your actions are never accurate
(Second Thought)

People always trying to hurt somebody else
People always find unexisting evidence
People never want me to find real happiness
Everything I do means that I'm a mess
(Critical)

Sex, drugs and alcohol
Philosophy of rock 'n' roll
You should have an own patrol
To keep an eye on you everytime you lose control
Cause everytime I look at your eyes
Your pupils are colder than ice
You're self-centred and independent
So I've lost all my hopes
That you'll hear my advice
(Fabulous)

Before you accuse an innocent
You must have proves to justify
Before you take a risk you must
Be sure that this is gonna last
So if you've got doubts in your heart
I'm gonna wait, no matter how long
Cause I will love you still
(Let Me Know If You're In Love With Me)

You're worse than weed
You're the addiction of my soul
You're the cruelest fear
You've got me trapped inside a hole
And you're what I want
What I desire, who I love
You're the revenge of a game that I lost
(Feels Like Home)

Systematic free-fall in the arms of pain
The story of me and you was just the same
Different players of the same old game
Once I would have taken the risk to take the blame
But now I know it's not me who is to blame
Love is devil with the face of saint
(Won't Take It Anymore)

Two was like the Sun in the weather
And that is why my sky was always cloudy
Two was the promise that you would never
And that is why it turned out to be always
(Alone)

07 febrero 2009

Autorrespeto.

A veces creemos que esa persona lo es todo. Nos involucramos, traspasamos la delicada línea entre el apoyo y la dependencia y no nos imaginamos cómo sería vivir sin ella. Creemos en la miseria que nos rodearía si nos desprendiésemos tan fácilmente de ella, nos mienta, engañe o torture. Pero en realidad es como cuando alguien se muere en una película. Cuando cierra los ojos ve una luz. O unas escaleras que lo guían hacia una luz. Y entonces llega la liberación.

Desde que te fuiste he perdido un chip en mi espalda.
Desde que te fuiste siento como si me hubiese hecho mayor.
Y ahora que te fuiste es como si el mundo entero fuese mi escenario.
Y ahora que te fuiste es como si hubiese sido liberado de mi celda.
-Lily Allen.
A veces te echo de menos, aun dos años después. Pero estoy muy bien sin ti. Siempre digo que a quien echo de menos no es a ti sino lo que representabas en mi vida. Navegué por ambas orillas del río de la dependencia y supe hacer la decisión correcta respecto a cuál arrimarme. Por ello me agradezco, por no haber dejado que la venda se adentrase y poderla hacer caer a tiempo, por observar la hoja de ruta con cautela y no navegar sin rumbo fijo, por ser fiel a mí mismo y no dejarme engatusar con palabras bonitas pero efímeras. Por ser el primero en mi jerarquía de felicidad. Porque eso no es egoísmo: es respeto por uno mismo.

31 enero 2009

Malvada.

Biblioteca de Ciencias Económicas y Empresariales. 21:00 h aprox.

Anxos me coge el típex. Hace una raya enorme en mi esquema del tema 8 de Fotoxornalismo, el cual estoy tuneando con mis anotaciones a los lados.
Después me coge el boli.
Escribe su nombre sobre el típex.
"Son mis apuntes, Anxos", le digo.
"Es igual", me contesta. "Voy a dibujar un animador masculino por la igualdad de géneros, deberían hacerlo en Estados Unidos".
"Anxos, ¡que voy a estudiar por este esquema! Como pregunte este tema le pongo tu dibujo".
"Es igual, es igual".
Comienza a dibujar un animador algo amorfo.
"¡Que son mis apunteeeeeees!"
Lo dibuja.
"Me has arruinado los apuntes, ¡ahí tenía que escribir!".
"...¡Aaaahh! Perdón... Ahora me siento un poco culpable. Sólo un poco".
"Para mí, ya has dejado de ser amorosa".

Maldita Anxos, ahora mis apuntes están llenos de caos. Y típex, mucho típex.

29 enero 2009

Mi chaqueta...

El jueves Carolina y yo nos dimos un premio por un examen que probablemente habíamos suspendido (ella no, cosa que me alegra y entristece a la vez al desconocer el resultado del mío). ¿Cuál? Ir de compras. El señor Amancio me recompensó con dos chaquetitas de botones tan monas, tan monas, tan monas -una gris y otra azul marino con rayitas de colores- que lo maldije mil veces por hacerme gastar tanto. Y es que soy gayer persona, y los hombres y comprar ropa me pierden.

El caso es que hoy por la mañana me dispuse a ponerme una con una camiseta del mismo gris y el chaleco para darme un poco más de calorcito (y como sólo abroché 2 botones, me gustaba el efecto por arriba gris, por abajo negro -y sí, estoy pirado-). Lo hice y fui a la biblioteca con CaR, una persona que se hace blog y no me avisa. Al volver a mi genial y céntrico piso (sobre todo céntrico.) me hice una tortilla. Pero oh, maldición, ¿qué coño pasa? ¿Por qué no sales del cartón, huevo, por qué estás pegado? ¡Sal, sal, sal! ¡NOOOOOOOOOOOO!


Sí. La manga de mi chaqueta adquirió un bonito color anaranjado y para nada pringoso. Suerte que hoy era día de colada. By the way, estoy estrenando mi otra chaqueta nueva. Con la suerte que tengo me caeré en el barro o me cagará un perro encima :)

25 enero 2009

Amazing

CaR, Pichel y yo nos dirigíamos a la salida oeste de nuestra Facultad hablando de paranoias varias ante las cuales un servidor no pudo reprimir un sincero y sentido "Qué fuerte". Eso mientras cruzábamos la puerta y nos parábamos una vez en el exterior para las despedidas varias.

Acto seguido aparece un hombre de la nada cual fantasma, el cual proclama:

-¿Esto es súper periodismo?

Nosotros, que somos educados hasta decir basta, contestamos un precioso

-Sí.

Cuál es nuestra sorpresa cuando el individuo se despide con un bonito y elaborado discurso que dejó una huella imborrable en nuestros corazones:

-Qué fuerte

Y se adentra al edificio.

Para los lentos que tienen un nivel de aprendimiento más pausado, reproduzco el diálogo sin interrupciones para una mejor comprensión.

-¿Esto es súper periodismo?
-.
-Qué fuerte.

Ring ring.

-¿Hola?
-Hooooooooooombreeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee.
-(¿Quién cojones eres y por qué tienes mi número, usuario con prefijo desconocido por mi persona?)...¿quién es?
-¡Jesúuuuuuuuuuus! ¡Soy tu amigo del almaaaaaa!
-...Te has confundido.
-Venga, hombre, ¡no me tomes el pelo!
-(Me cago en tu madre) Que no, que no soy Jesús.
-¡Que sí que eres Jesús!
-(Como te pille te meto el teléfono por el) ¡Que no, coño, que no!
-Venga, no me vaciles.
-A ver... ¿de dónde llamas?
-¿Yo? Deeeee *pueblo barcelonés de cuyo nombre no me acuerdo*
-Pues yo soy de Santiago (no soy de Santiago, pero acabo antes así para la ubicación geográfica, además a ti qué coño te importa de donde sea, ¡que no soy Jesús!).
-¿Santiago, qué Santiago?
-Santiago de Compostela (de Chile, no te jode)
-¡Qué dices! Ahh... Bueno, chao.
-Chao, lentaco.

16 enero 2009

Malditos.

Ayer me di un poco de asquete haciendo uno de los numerosos trabajos con los que nuestros profesores deciden amargarnos las semanas previas al estudio intensivo durante el temido mes de febrero. Aunque este venía dicho desde noviembre, pero es para exponer ahora (y me dirás tú quién hace un trabajo en noviembre para exponer dos meses después). ¿El reto? Parodiar al escritor y periodista Tom Wolfe y hacer sonreír, al menos, al profesor. Un momento... ¿Sólo eso? Qué va, otros retos incluían:
· Lograr la aprobación del profesor. Conseguido, aunque fuese el de la otra profesora.
· Encontrar un aula vacía donde poder dar rienda suelta a nuestra imaginación acumulada. Conseguido.
· No reírme durante mi interpretación de un individuo con tendencias narcisistas, políticamente de derechas y con ideales como la supremacía de la etnia blanca, de los hombres sobre las mujeres, de los cristianos sobre practicantes de cualquier otra religión, de los norteamericanos sobre el resto del universo -en concreto sudamericanos y orientales- y condenante del amor entre personas del mismo sexo. Ah, y bastante salido. Obviamente ese reto no se consiguió.

Niños, leedme bien: no intentéis parodiar el Celebrities de Muchachada Nui en casa. Primero, porque se pueden tardar 3 horas para un vídeo de 3 minutos. Segundo, porque puedes decir cosas como "malditos sudacas" o "negrata de mierda" o "yo soy un amo del universo" o "¿estás grabando ya?. Esta última unas veinte veces en todo el transcurso de la jornada. Y tercero, porque luego tendrás un vídeo de una media hora que te tocará editar en el modesto Movie Maker de tu portátil y, aunque todavía no esté hecho, te puedes cagar en los mismísimos antepasados del primer Wolfe de la historia ya que te llevará, por lo menos, por lo menos, un día. Y es para este martes. Y si tienes un examen que apenas has mirado el jueves... da que pensar. En el suicidio.

10 enero 2009

Nieve :)

09 · 01 · 2009



Quizás por tierras ordinarias aprovechemos cualquier circunstancia para sacarnos fotografías, pero cuando se juntan dos habitantes de ría que jamás han visto nevar en su vida y dos santiaguesas que hacía tres años que no veían su ciudad inundada de una fina capa blanca, vale la pena coger un ordenador portátil, colocarte delante de las grandes vidrieras del pasillo que da al auditorio (y al aula 0) -podríamos salir a fuera, pero no había ganas de volver a clase a por los abrigos- y, como pone en mis apuntes de fotoxornalismo, usar la fotografía con su función turística como prueba de que estuviste allí.



Aunque no nevó mucho, el parque infantil de los edificios en los que vivo en la capital gallega estaba blanco, al igual que el césped que redondea la facultade de ciencias da comunicación, con lo que a uno se le alegra la mañana al contemplar algo que en su casa no ha visto ni en sueños. Y aunque no hicimos las figuritas de ángeles en el suelo...



...un oportuno juego/efecto de luces puede hacer que tú te conviertas en el angelito del día.

Volver.

Esquecerme do estrés, das prazas límites, da discordia, os malos entendementos, as polémicas de cinco minutos, as de días e as que duran toda a vida. Esquecerme dos puñais que levo cravados nas costas por parte de persoas alleas -que descoñecendo o meu nome se permitían o luxo de odiarme-, as contradicións que rexen o día a día, a incomprensión tan desenvolvida ó longo dos anos e os fortes anhelos inxustamente incumpridos. Tamén me gustaría esquecerme das apariencias, da falsidade e en conxunto de todo aquilo que non fai que unha persoa se sinta especialmente orgullosa. Pero sen esquece-la conformidade por quen son, a honra que me supón o mero feito de considerarme unha persoa decente, boa, o máis transparente posible, moi estraña -o común aborrece, abonda, non me interesa- e comprometida con aquilo que cre e defende. Eu.

07 enero 2009

Bendita inocencia

Bendita inocencia, que te marchaste sin decir adiós...



...y me dejaste solo en un mar de pensamientos obscenos, dificultades, dudas y una infinidad de obstáculos que no sé si podré ser capaz de superar sin ser ayudado. Dame tu mano, inocencia, y dime que algún día volverás, aunque no sea verdad. Dímelo, porque si hablas conmigo sabré que una parte de ti todavía no se ha marchado del todo, y que siempre vivirás en mi interior.

06 enero 2009

Despertar.

Tu cuerpo, tus labios, tus ojos, tu nariz, tus manos, tu cuello, tu pecho. Se entremezclan los sonidos de nuestras respiraciones, nuestros latidos y la sirena de un tren que está a punto de partir rumbo a lo desconocido. La muchedumbre se amontona a sus puertas. El tiempo de subida es limitado y quienes no lleguen a tiempo quedarán sin remedio en la estación. Hay demasiada gente y no lo vamos a lograr... Pero yo te quiero llevar como sea y no acepto un no por respuesta, no te permitiré que me rechazes antes de tiempo.  La sirena vuelve a sonar, las puertas están a punto de cerrarse. Te cojo de la mano y nos teletransporto dentro del tren. Dije que te quería llevar, y aquí estamos. Queda media hora de viaje y estamos callados, porque a veces las palabras son complementos innecesarios, elementos secundarios que nunca eclipsarán el significado de algo tan simple como un beso o una mirada. Tu cuerpo, tus labios, tus ojos, tu nariz, tus manos, tu cuello, tu pecho... quiero recorrerlos con las yemas de mis dedos, sentirlos como si fuesen parte de mi propio cuerpo, fundirnos en uno al ritmo de un dulce blues bajo un paisaje volcánico a punto de estallar, dejar que estalle y disfrutar de la sensación antes de despertar y tener que aceptar la realidad.

05 enero 2009

Interferencias.

Quiero verte y tú quieres verme. Quieres contarme, quiero contarte, quiero que me cuentes, queremos hablar, quieres que te escuche y quiero que tú también me escuches a mí. Pero hay cosas que quiero que me hagas, que quiero hacerte, y que a la hora de la verdad serán un billete de ida y vuelta, sabiendo que no me dejarás quedarme en el destino de ida. Que mi mensaje será una simple interferencia en mitad del proceso comunicativo, que las palabras se confundirán entre las ondas sonoras y ningún satélite situado en tu cabeza descodificará mi señal con claridad. O quizás no sea una interferencia y simplemente... ese mensaje no exista. Y es que antes de comunicar, hace falta saber en qué lenguaje hacerlo. Y cuando estoy contigo, el único lenguaje que me gustaría emplear...

04 enero 2009

Lo que nunca te he dicho:

-Eres muy importante para mí
-Mi vida sin vosotras ya no tendría sentido
-A veces te pagaría para que te callases
-Me has hecho daño
-Estoy cansado de tirar hacia delante para que de repente sueltes la cuerda
-Quiero que seas la razón por la que despierto cada mañana.