31 enero 2009

Malvada.

Biblioteca de Ciencias Económicas y Empresariales. 21:00 h aprox.

Anxos me coge el típex. Hace una raya enorme en mi esquema del tema 8 de Fotoxornalismo, el cual estoy tuneando con mis anotaciones a los lados.
Después me coge el boli.
Escribe su nombre sobre el típex.
"Son mis apuntes, Anxos", le digo.
"Es igual", me contesta. "Voy a dibujar un animador masculino por la igualdad de géneros, deberían hacerlo en Estados Unidos".
"Anxos, ¡que voy a estudiar por este esquema! Como pregunte este tema le pongo tu dibujo".
"Es igual, es igual".
Comienza a dibujar un animador algo amorfo.
"¡Que son mis apunteeeeeees!"
Lo dibuja.
"Me has arruinado los apuntes, ¡ahí tenía que escribir!".
"...¡Aaaahh! Perdón... Ahora me siento un poco culpable. Sólo un poco".
"Para mí, ya has dejado de ser amorosa".

Maldita Anxos, ahora mis apuntes están llenos de caos. Y típex, mucho típex.

29 enero 2009

Mi chaqueta...

El jueves Carolina y yo nos dimos un premio por un examen que probablemente habíamos suspendido (ella no, cosa que me alegra y entristece a la vez al desconocer el resultado del mío). ¿Cuál? Ir de compras. El señor Amancio me recompensó con dos chaquetitas de botones tan monas, tan monas, tan monas -una gris y otra azul marino con rayitas de colores- que lo maldije mil veces por hacerme gastar tanto. Y es que soy gayer persona, y los hombres y comprar ropa me pierden.

El caso es que hoy por la mañana me dispuse a ponerme una con una camiseta del mismo gris y el chaleco para darme un poco más de calorcito (y como sólo abroché 2 botones, me gustaba el efecto por arriba gris, por abajo negro -y sí, estoy pirado-). Lo hice y fui a la biblioteca con CaR, una persona que se hace blog y no me avisa. Al volver a mi genial y céntrico piso (sobre todo céntrico.) me hice una tortilla. Pero oh, maldición, ¿qué coño pasa? ¿Por qué no sales del cartón, huevo, por qué estás pegado? ¡Sal, sal, sal! ¡NOOOOOOOOOOOO!


Sí. La manga de mi chaqueta adquirió un bonito color anaranjado y para nada pringoso. Suerte que hoy era día de colada. By the way, estoy estrenando mi otra chaqueta nueva. Con la suerte que tengo me caeré en el barro o me cagará un perro encima :)

25 enero 2009

Amazing

CaR, Pichel y yo nos dirigíamos a la salida oeste de nuestra Facultad hablando de paranoias varias ante las cuales un servidor no pudo reprimir un sincero y sentido "Qué fuerte". Eso mientras cruzábamos la puerta y nos parábamos una vez en el exterior para las despedidas varias.

Acto seguido aparece un hombre de la nada cual fantasma, el cual proclama:

-¿Esto es súper periodismo?

Nosotros, que somos educados hasta decir basta, contestamos un precioso

-Sí.

Cuál es nuestra sorpresa cuando el individuo se despide con un bonito y elaborado discurso que dejó una huella imborrable en nuestros corazones:

-Qué fuerte

Y se adentra al edificio.

Para los lentos que tienen un nivel de aprendimiento más pausado, reproduzco el diálogo sin interrupciones para una mejor comprensión.

-¿Esto es súper periodismo?
-.
-Qué fuerte.

Ring ring.

-¿Hola?
-Hooooooooooombreeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee.
-(¿Quién cojones eres y por qué tienes mi número, usuario con prefijo desconocido por mi persona?)...¿quién es?
-¡Jesúuuuuuuuuuus! ¡Soy tu amigo del almaaaaaa!
-...Te has confundido.
-Venga, hombre, ¡no me tomes el pelo!
-(Me cago en tu madre) Que no, que no soy Jesús.
-¡Que sí que eres Jesús!
-(Como te pille te meto el teléfono por el) ¡Que no, coño, que no!
-Venga, no me vaciles.
-A ver... ¿de dónde llamas?
-¿Yo? Deeeee *pueblo barcelonés de cuyo nombre no me acuerdo*
-Pues yo soy de Santiago (no soy de Santiago, pero acabo antes así para la ubicación geográfica, además a ti qué coño te importa de donde sea, ¡que no soy Jesús!).
-¿Santiago, qué Santiago?
-Santiago de Compostela (de Chile, no te jode)
-¡Qué dices! Ahh... Bueno, chao.
-Chao, lentaco.

16 enero 2009

Malditos.

Ayer me di un poco de asquete haciendo uno de los numerosos trabajos con los que nuestros profesores deciden amargarnos las semanas previas al estudio intensivo durante el temido mes de febrero. Aunque este venía dicho desde noviembre, pero es para exponer ahora (y me dirás tú quién hace un trabajo en noviembre para exponer dos meses después). ¿El reto? Parodiar al escritor y periodista Tom Wolfe y hacer sonreír, al menos, al profesor. Un momento... ¿Sólo eso? Qué va, otros retos incluían:
· Lograr la aprobación del profesor. Conseguido, aunque fuese el de la otra profesora.
· Encontrar un aula vacía donde poder dar rienda suelta a nuestra imaginación acumulada. Conseguido.
· No reírme durante mi interpretación de un individuo con tendencias narcisistas, políticamente de derechas y con ideales como la supremacía de la etnia blanca, de los hombres sobre las mujeres, de los cristianos sobre practicantes de cualquier otra religión, de los norteamericanos sobre el resto del universo -en concreto sudamericanos y orientales- y condenante del amor entre personas del mismo sexo. Ah, y bastante salido. Obviamente ese reto no se consiguió.

Niños, leedme bien: no intentéis parodiar el Celebrities de Muchachada Nui en casa. Primero, porque se pueden tardar 3 horas para un vídeo de 3 minutos. Segundo, porque puedes decir cosas como "malditos sudacas" o "negrata de mierda" o "yo soy un amo del universo" o "¿estás grabando ya?. Esta última unas veinte veces en todo el transcurso de la jornada. Y tercero, porque luego tendrás un vídeo de una media hora que te tocará editar en el modesto Movie Maker de tu portátil y, aunque todavía no esté hecho, te puedes cagar en los mismísimos antepasados del primer Wolfe de la historia ya que te llevará, por lo menos, por lo menos, un día. Y es para este martes. Y si tienes un examen que apenas has mirado el jueves... da que pensar. En el suicidio.

10 enero 2009

Nieve :)

09 · 01 · 2009



Quizás por tierras ordinarias aprovechemos cualquier circunstancia para sacarnos fotografías, pero cuando se juntan dos habitantes de ría que jamás han visto nevar en su vida y dos santiaguesas que hacía tres años que no veían su ciudad inundada de una fina capa blanca, vale la pena coger un ordenador portátil, colocarte delante de las grandes vidrieras del pasillo que da al auditorio (y al aula 0) -podríamos salir a fuera, pero no había ganas de volver a clase a por los abrigos- y, como pone en mis apuntes de fotoxornalismo, usar la fotografía con su función turística como prueba de que estuviste allí.



Aunque no nevó mucho, el parque infantil de los edificios en los que vivo en la capital gallega estaba blanco, al igual que el césped que redondea la facultade de ciencias da comunicación, con lo que a uno se le alegra la mañana al contemplar algo que en su casa no ha visto ni en sueños. Y aunque no hicimos las figuritas de ángeles en el suelo...



...un oportuno juego/efecto de luces puede hacer que tú te conviertas en el angelito del día.

Volver.

Esquecerme do estrés, das prazas límites, da discordia, os malos entendementos, as polémicas de cinco minutos, as de días e as que duran toda a vida. Esquecerme dos puñais que levo cravados nas costas por parte de persoas alleas -que descoñecendo o meu nome se permitían o luxo de odiarme-, as contradicións que rexen o día a día, a incomprensión tan desenvolvida ó longo dos anos e os fortes anhelos inxustamente incumpridos. Tamén me gustaría esquecerme das apariencias, da falsidade e en conxunto de todo aquilo que non fai que unha persoa se sinta especialmente orgullosa. Pero sen esquece-la conformidade por quen son, a honra que me supón o mero feito de considerarme unha persoa decente, boa, o máis transparente posible, moi estraña -o común aborrece, abonda, non me interesa- e comprometida con aquilo que cre e defende. Eu.

07 enero 2009

Bendita inocencia

Bendita inocencia, que te marchaste sin decir adiós...



...y me dejaste solo en un mar de pensamientos obscenos, dificultades, dudas y una infinidad de obstáculos que no sé si podré ser capaz de superar sin ser ayudado. Dame tu mano, inocencia, y dime que algún día volverás, aunque no sea verdad. Dímelo, porque si hablas conmigo sabré que una parte de ti todavía no se ha marchado del todo, y que siempre vivirás en mi interior.

06 enero 2009

Despertar.

Tu cuerpo, tus labios, tus ojos, tu nariz, tus manos, tu cuello, tu pecho. Se entremezclan los sonidos de nuestras respiraciones, nuestros latidos y la sirena de un tren que está a punto de partir rumbo a lo desconocido. La muchedumbre se amontona a sus puertas. El tiempo de subida es limitado y quienes no lleguen a tiempo quedarán sin remedio en la estación. Hay demasiada gente y no lo vamos a lograr... Pero yo te quiero llevar como sea y no acepto un no por respuesta, no te permitiré que me rechazes antes de tiempo.  La sirena vuelve a sonar, las puertas están a punto de cerrarse. Te cojo de la mano y nos teletransporto dentro del tren. Dije que te quería llevar, y aquí estamos. Queda media hora de viaje y estamos callados, porque a veces las palabras son complementos innecesarios, elementos secundarios que nunca eclipsarán el significado de algo tan simple como un beso o una mirada. Tu cuerpo, tus labios, tus ojos, tu nariz, tus manos, tu cuello, tu pecho... quiero recorrerlos con las yemas de mis dedos, sentirlos como si fuesen parte de mi propio cuerpo, fundirnos en uno al ritmo de un dulce blues bajo un paisaje volcánico a punto de estallar, dejar que estalle y disfrutar de la sensación antes de despertar y tener que aceptar la realidad.

05 enero 2009

Interferencias.

Quiero verte y tú quieres verme. Quieres contarme, quiero contarte, quiero que me cuentes, queremos hablar, quieres que te escuche y quiero que tú también me escuches a mí. Pero hay cosas que quiero que me hagas, que quiero hacerte, y que a la hora de la verdad serán un billete de ida y vuelta, sabiendo que no me dejarás quedarme en el destino de ida. Que mi mensaje será una simple interferencia en mitad del proceso comunicativo, que las palabras se confundirán entre las ondas sonoras y ningún satélite situado en tu cabeza descodificará mi señal con claridad. O quizás no sea una interferencia y simplemente... ese mensaje no exista. Y es que antes de comunicar, hace falta saber en qué lenguaje hacerlo. Y cuando estoy contigo, el único lenguaje que me gustaría emplear...

04 enero 2009

Lo que nunca te he dicho:

-Eres muy importante para mí
-Mi vida sin vosotras ya no tendría sentido
-A veces te pagaría para que te callases
-Me has hecho daño
-Estoy cansado de tirar hacia delante para que de repente sueltes la cuerda
-Quiero que seas la razón por la que despierto cada mañana.